Déjame llorar mi propia muerte.

Páginas sueltas con partes de mi vida, de esta vida marcada por el abandono, por los desengaños, las traiciones, páginas sueltas de una vida vacía que a nadie le importa, soy una marioneta de trapo que la vida me regaló un trazo de vida, voy dando tumbos en el océano de este mundo, me lleva cuesta abajo,
abro los ojos, si pudiera escribir diría, por qué vienen seres desgraciados a este mundo. Déjame llorar mi propia muerte.