Un día me di cuenta que tengo mis manos vacías
y yertas, nadie quien me las caliente, muero de soledad, hojas sueltas del rosal, hojas sueltas de mi calendario, me detengo y me pregunto quién soy, a qué vine a este plano, que soy una estrella que murió hace años y sigue brillando en el infinito,
no sé si soy real o no existo.

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