Después de libar en mi rosal de amor te ciegas con otra flor y me pisoteas mis pétalos, por qué los míos no valen nada para ti, no te ciegues con los fulgores de tu nueva pasión, porque vas a pagar toda tu maldad, toda tu traición y vas llorar por mis pétalos pisoteados, por haberme clavado el puñal de tu maldad en mi corazón, ese día que caiste vencido yo lloré no por ti, lloré por mí, suenan las campanas por mi alma muerta, ¿viste ahora qué puedes ver por qué pasó eso?
No hay comentarios:
Publicar un comentario