Esta ventana que llora conmigo, soy sombra que te llama, quiero soltar las amarras, pero no puedo, extraño tu sonrisa que es el sol que ahuyenta el invierno de mi rostro, conocí tu ira en un ataque de celos, te ofendí, comprendiste que eran celos y me perdonaste,
dónde puedo alcanzarte con mi pluma y escribirte que me esperes en el cielo o dónde estés.
No hay comentarios:
Publicar un comentario