domingo, 20 de mayo de 2018

Manos

Esa noche regresaste derrotado pidiéndome como que soy un dios, yo lo único que puedo darte es mi amor, me traicionaste, me clavaste el puñal de la traición, pero a mi me rozó a ti se clavó en el corazón, quién desvió el puñal, qué manos invisibles se vengó.

No hay comentarios:

Publicar un comentario