jueves, 18 de septiembre de 2014

Sentada al pie de un árbol vetusto, las hormigas me pican, trato de quitármelas, pero son muchas, me quito la ropa, la sacudo y camino hasta el río, nado un rato y vuelvo al árbol, el árbol me pregunta, ¿no tienes miedo de que te caiga encima? Le respondo, no te vas a caer aún y le tengo miedo es a una guerra en la que la gente se convierta en demonios.

No hay comentarios:

Publicar un comentario