Miro hacia ese pasado lejano, que ya no me causa dolor, es una mala película que protagonice en mis años de principiante.

Ataste mi alma a la tuya, con un lazo tan fuerte, que nunca se rompera.

Me olvidaste y el mundo sigue girando y es cruel este silencio que me hace mal, ahora vienes con tus palabras de consuelo, hipócrita no quiero tu consuelo.

Soy feliz! En mi vida fuiste una leve brisa, que apenas me rozó.

La noche que descubri que ya no me amabas, la angustia lleno mi corazon, con mano temblorosa te escribi una nota de despedida y corri sin rumbo bajo la lluvia, queria que borrara la huella de tus besos, caricias, ese dia jure que nunca volveria amar, ni llorare por nadie.

Desde esta roca veo la inmensidad del mar, sus aguas azules esta en calma, veo esos grandes barcos que vienen de puertos lejanos y siento deseos de recorrer el mundo y dejar todas mis penas en esta roca.

El mar te lleva lejos de mí, camino hacia el mar vertiendo mis lágrimas en él, solo viendo al barco nado hasta que no puedo mas, me regreso y me siento, me duele el corazón, parte de él se va contigo.

Oigo el mar cantar, veo la luna brillar, las estrellas titilar, mi corazón palpita de emoción, al verte a mi lado caminando a la vera de la playa, agarrados de manos sin decir nada, solo oyendo el canto del mar.

Esta soledad, este vacio, este vivir por vivir.

En el jardín de mi corazón, sembraste las flores mas bellas, se marchitaron por las tinieblas de tu olvido.

Infeliz aprovechaste que el perro se soltó de la correa, no está solo. 

Esta noche miro las estrellas y me recuerdan a tus ojos, cuando me mirabas con el fulgor de ellas, ya se opacaron para mí, extraño esas miradas ¿A quién miraras ahora así?

Quiero que esta noche sea eterna, noche quedate conmigo, noche de luna llena, que sin pedirme permiso llega hasta mi cama, es como un cubrecama que me arropa, del jardín me llega el perfume de las flores, el cri cri de lo grillos, una música suave a lo lejos.  

Aunque tratas de olvidarme, nunca podrás porque soy inolvidable y ese tormento es mi alegría, porque jamás podrás borrarme de tu alma.

Esta ilusión que aún anida en mi corazón, me hace sentir los besos que me enviabas, recibes tú los qué te envió con el viento.

Mi mente vaga en ensoñaciones y vuelve a la realidad que no quiero, para no sentir el vació de tu ausencia, que me aterra, este amor que me consume y me llena de desesperación.

Si tú me quisieras, los ángeles me dedicaran una canción tocada con lira, para que serene mi alma y en coro cantaran, ¡Si te quiere, si te quiere! Cuando terminaron llegaron los ruiseñores, en el alfeizar de mi ventana se posaron un rato, de repente cantaron con sus cantos inolvidable por su volumen, su variedad de notas y por la fuerza con que es emitido, las estrellas también cantaron, me llamaron, ¿oíste? Alegrate todos te amamos

En la madrugada me asomo a la puerta, oigo cuando pasaste frente a la puerta de la hacienda, nuestras miradas se cruzaron, reíste y me quedé petrificada, no podía caminar, empecé a llorar me despierto sobresaltada, me levanté, me calcé la bata, salí a la cocina, me serví un vaso de agua, caminé al porche, me acerqué a donde te fuiste y te grité ¡te vi partir! Y lance el vaso.

Arrepentida buscándote con mis lágrimas no se como no cambie al planeta con nuevos mares, ríos, cascadas, mis manos te escriben sin pedirme permiso, mi boca anhela besarte todo y en voz queda dice tu nombre y mi cuerpo arde de deseos por ti.

Un gran aplauso y un brindis para celebrar lo estúpida que fui al creer en ti, en ese amor que no sientes y que fui yo quien lo invento. ¡Salud!

Dices que no me amas, pero cuando me ves tus ojos brillan, tu boca me besa, tu cuerpo se estremece de emoción. Hay un embrujo entre los dos, que ni se puede explicar. Te diste cuenta que me amas, cuando cantaste tu mejor canción y me la dedicaste, igual que el pájaro espino.

Mi entusiasmo me ayuda a ver solo lo bueno de la vida, me abre puertas donde no hay, mi alma no dormita, vibra de emoción al ver la creación de Dios.

Te dejé partir, vuela alto, que allí estará DIOS con sus manos extendidas, para ayudarte a volar mas alto.

Te olvidé, de tu amor solo cenizas quedan y el fuerte viento viene en mi ayuda, se las lleva muy lejos de mi, hasta se me olvido que te conocí.

La libélula con su vuelo ágil moviéndose en todas direcciones, recorre el jardín, se posa de flor en flor.

Me refugiaré en otros brazos y cerraré mis ojos pensaré que eres tú.    

Viendo la inmensidad del mar, que al final parece que el mar   se  une con el cielo, pero nunca lo harán, así somos tú y yo

Cruzaré el mar, caminando con mis pensamientos que flotan en el aire, llegaré, te besaré y regresaré muy feliz.

Mi anhelo es poder volar y remontarme muy alto deslizarme por las nubes verte y seguir tus pasos.

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No quiero más ausencias o te quedas o te vas, la ausencia es olvido y si vuelvo contigo que me castigue Dios.

En mi desesperación, quisiera preguntarle a Dios por qué une almas viviendo en islas distantes sin saber nadar e idiomas diferentes ¿Por qué y para que?

«Por ti seguí mis sueños, un día me rendí y ahora mi sueño es una realidad. ¡Gracias!» 

Las plantas se alegran, porque el roció no duerme, para que ellas se mantengan hermosas y corre por sus pétalos como lagrimas de alegría.

Cuando te fuiste me envolvieron las sombras, mi corazón enmudeció, mis ojos se secaron de tanto llorar y ahora vuelves, sabes a pesar de amarte tanto ¡Te olvide!

De paseo por esta región montañosa, busco la laguna de los gansos, bajo un cerro y oigo sus graznidos como risas tontas, la mayoría son blancos pienso —¡Que bueno! Ellos son parejas estables

Recuerdo nuestras noches de pasión, cuando recorrías todo mi cuerpo con tus besos y caricias, que me hacías estremecer de emoción y me sentía tan tuya, como la arena del mar.

Amarte es como echarle agua al mar, me cansé de ir contra la corriente, sin poder mirarte a los ojos, ya sin tu amor.

Siento no poder verte llorar por otra, para reírme y despreciarte, ese es el precio que tenías que pagar. ¿Por qué si no me amabas? Para que engañarme.

El pajarito se posa en un árbol, canta, se pierde entre las hojas, hay un niño agarra una piedra y se la tira, el pobre pajarito cae muerto y su pareja se acerca lo ve, al ver esa escena me pongo a llorar.   

Un día llegó a mi vida un hada pequeñita, con su vestidito blanco, su cabello negro y me dijo, «escribe que yo te ayudo» y encontré el tesoro escondido de mi imaginación y conocí mundos ignotos lejanos, dichas, desdichas, amores sublimes y prohibidos

Tú, mi condena, mi amor imposible.

La orquídea, símbolo de nuestro amor, la cubre las gotas del rocío, es la unión de dos almas, solo primavera existirá en nuestro amor y en la orquídea.

Esta tarde caminé por todos los sitios que visitamos, el lago estaban unos enamorados, al verlos, lloré, te recordé, los miraba y reviví esos momentos, llegue al puente donde nos sentábamos, por un momento creí ver tu mano recogiendo flores y adornando mi cabellera, corrí, mi corazón estaba como que iba estallar porque sabía que vives aún en mi alma, me calmé, regreso y caminé, volví al puente, porque sé que estás en el aire,en la tierra y donde estoy.

La laguna esta congelada y en la noche estrellada parece de cristal, la luna inmensa ilumina el camino y deseo verte llegar corriendo hacia mi, como lo hacías antes
y unirnos en un abrazo.

El tiempo peregrino pasa y aún sigues en mi alma, corazón, recuerdos y piel.

 Caminé hacia el teatro, cuando entré, todos los presentes me saludaron y casi corrí al camerino, corren los maquilladores porque ya tengo que salir, es como un sueño, ya estoy maquillada, vestida, me veo en el espejo con mi vestido negro, me siento orgullosa de lo linda que estoy, salen todos a presentar sus números, ríen, corren, casi todos hicieron su presentación y yo paralizada «¿Dónde estás?» Nadie se da cuenta que estoy sola, aterrada, lo único que me llevo fue nuestra foto y corrí por la avenida, me cansé, me senté en la acera a ver nuestra foto y preguntarte ¿por qué no viniste a la última presentación?